La red social ha dejado de publicar noticias de medios australianos después de que el gobierno presentara una ley para hacer pagar estos contenidos
Facebook, la red social más utilizada del mundo, ha decidido borrar los contenidos informativos de todas sus páginas en Australia, donde tiene más de 13 millones de usuarios según datos de la compañía.
De este modo, los perfiles de Facebook de los medios de comunicación australianos han quedado vacíos, de la misma forma que los usuarios y usuarias de la red social ya no pueden compartir artículos, vídeos ni otros contenidos producidos por los medios.
Es la consecuencia de un nuevo proyecto de ley del gobierno australiano que tiene como objetivo que las grandes empresas de internet paguen por la información que aparece en sus plataformas pero que está elaborada por diarios, canales de televisión y otras plataformas de información.
Según las autoridades australianas, empresas como Facebook o Google se están aprovechando de estos contenidos para sacar beneficios, porque así tienen más visitas y más tráfico en las redes sociales. Gracias a este aumento de visitas, también obtienen más ingresos por publicidad. Por eso el gobierno cree que deberían pagar por colgar los contenidos en sus plataformas.
Con la nueva ley, las grandes empresas tecnológicas deberían llegar a un acuerdo con las empresas mediáticas (propietarias de diarios, televisiones y otros medios de comunicación) y pagar por publicar sus noticias o bien repartirse los beneficios de publicidad.
Sin embargo, desde Facebook argumentan que es al revés: que son los medios de comunicación los que obtienen un beneficio porque, al salir en el muro de Facebook, ganan visibilidad y consiguen más visitas.
Lo cierto es que internet ha revolucionado la forma de consumir información. A día de hoy, cerca del 80% de los australianos utilizan internet y las redes sociales para informarse, según un estudio del Instituto Reuters de Periodismo y la Universidad del Oxford.
De momento, la propuesta de ley ha sido aprobada en el congreso australiano, a la espera de debatirse en el senado. El caso ha despertado interés en todo el mundo porque podría suponer un precedente y hacer que otros gobiernos se plantearan lo mismo: hacer pagar a las grandes empresas tecnológicas por publicar contenidos informativos.
Google accede a negociar
La nueva ley australiana también afecta a plataformas como Google, el buscador más utilizado del mundo. En un principio Google anunció que, si la ley se aprobaba, dejaría de estar disponible en Australia.
Esto provocó una gran polémica, porque Google es el buscador más utilizado con diferencia y controla el mercado australiano. Algunos políticos lo consideraron una amenaza pero también advirtieron que, si otros gobiernos seguían el ejemplo de Australia, podía suponer un problema para la compañía tecnológica porque también debería marcharse de esos países.
Al final, los representantes de Google han llegado a un acuerdo con algunos grupos mediáticos para poder utilizar sus contenidos en las búsquedas.
Sin embargo, algunos periodistas han criticado esta solución porque Google solo se ha sentado a negociar con gigantes como News Corp., uno de los grupos mediáticos más importantes de Australia y del mundo. De esta forma, las búsquedas favorecerán a los diarios mayoritarios y relegarán al final los medios más pequeños que realizan un periodismo alternativo, el que suele cuestionar el poder establecido.
¿Pagar por la información?
La semana pasada, Google llegó a un acuerdo similar con medios de comunicación de Francia para mostrar fragmentos de sus noticias en los resultados de búsqueda. Los medios franceses denunciaban que querían cobrar por derechos de autor.
Igual que Francia, Google ya ha firmado acuerdos con Alemania o Brasil para participar en Google News Showcase, un nuevo proyecto para colaborar con medios de comunicación de todo el mundo y pagarles por sus contenidos. La iniciativa cuenta con un presupuesto de 1.000 millones de dólares.
En 2014, España aprobó una ley que obligaba a Google a pagar una tasa por compartir noticias de diarios españoles en la aplicación Google News (pero no en el buscador). La ley pretendía recaudar millones de euros para los diarios, pero al final Google optó por cerrar la app en España.
En la actualidad, Google está negociando con varios diarios españoles para volver a ofrecer sus contenidos a cambio de una remuneración.
La Unión Europea aprobó en 2019 la llamada Ley del Copyright que pretendía proteger los derechos de autor en internet y las redes sociales. Una de las plataformas más afectadas fue YouTube, propiedad de Google, porque debía responsabilizarse de todos los contenidos publicados y asegurarse de que no tenían derechos de autor.
La nueva ley también provocó las quejas de activistas a favor de la libertad de expresión, además de youtubers o streamers que utilizan contenido de terceros para sus canales, porque lo consideran una forma de censura.
Fuentes: BBC, EFE, France 24, Economía Digital, Statista