Un grupo de expertos lleva meses investigando fenómenos aéreos no identificados y afirma que no hay suficientes datos para conocer su naturaleza
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) ha reconocido que algunos de los ovnis investigados durante los últimos meses por su grupo de estudio todavía no tienen explicación. Los expertos de este organismo sostienen que la falta de datos de alta calidad no permite aclarar con rigor la naturaleza de estos fenómenos.
Es la conclusión que han compartido esta semana en la primera reunión pública que este grupo de expertos ha organizado desde su creación en 2022. El grupo, que reúne a especialistas de diversos ámbitos como la física o la astrobiología, se constituyó el año pasado para llevar a cabo un análisis de los fenómenos aéreos no identificados.
Para referirnos a estos fenómenos hemos utilizado históricamente el término “objeto volador no identificado” (ovni). Sin embargo, ahora la NASA prefiere utilizar “fenómeno aéreo no identificado” (FANI), para alejarse de las teorías de la conspiración que durante años han rodeado a estos avistamientos inusuales.
A diferencia de lo que ocurre en las películas de ciencia ficción, cuando hablamos de ovnis o FANI nos referimos a cualquier objeto o fenómeno aéreo que no se puede identificar de manera inmediata y que no tiene una explicación clara en ese momento. Es decir, no implica automáticamente que se trate de una nave espacial extraterrestre.
El objetivo de los expertos de la NASA es buscar una explicación a estos fenómenos y avanzar en la comprensión científica del espacio y la atmósfera terrestre. El organismo ha asegurado que la investigación de estos objetos es de interés tanto para la seguridad nacional como para la seguridad aérea.
Pero el trabajo no está siendo fácil. Los científicos han señalado que durante meses han sido acosados por su trabajo, lo que ha dificultado la investigación. El equipo sostiene que es fundamental normalizar el estudio de estos fenómenos y, por esta razón, han decidido compartir públicamente sus últimos descubrimientos.
Tras esta primera reunión, se espera que el organismo publique en los meses de verano un informe más detallado sobre su actividad en este ámbito. Esto se convertiría en un hecho histórico ya que, durante años, el gobierno de Estados Unidos clasificó la información sobre los ovnis como secreto.
Ovnis, más allá de la conspiración
Cuando pensamos en ovnis es muy común que se nos venga a la cabeza la imagen de un platillo volante que sobrevuela la Tierra donde dentro viajan extraterrestres de otro planeta. Esta idea, que ha cautivado nuestra imaginación, se ha desarrollado a lo largo de los años en diferentes películas y series de televisión de ciencia ficción.
Esta idea también ha sido impulsada por pseudociencias como la ufología, que estudia y busca explicaciones extraterrestres para los ovnis. En lugar de basarse en evidencias objetivas, la ufología se apoya en testimonios subjetivos, relatos anecdóticos y teorías especulativas.
Desde el punto de vista científico, un ovni simplemente es cualquier objeto o fenómeno aéreo que no puede ser identificado de manera inmediata. La ciencia busca analizar y explicar estos fenómenos utilizando herramientas y métodos científicos rigurosos, como fotografías, vídeos, radares y testimonios verificables.
Además, la mayoría de los avistamientos tienen una explicación natural. A veces son fenómenos atmosféricos o astronómicos, otras simplemente son aeronaves convencionales y, en otros casos, se tratan de errores de percepción. Aún así, sigue habiendo fenómenos que son inexplicables y por eso los expertos siguen investigando.
¿Hay vida más allá de la Tierra?
La posibilidad de que haya vida más allá de nuestro planeta ha intrigado a la humanidad durante siglos. La ciencia lleva años realizando estudios exhaustivos para investigar si existen organismos vivos en otros lugares del espacio. Pero esta vida extraterrestre no necesariamente estará personificada en criaturas alienígenas como las de las películas.
Además del estudio de ovnis, la NASA también tiene un programa activo de astrobiología que investiga los orígenes, la evolución y la distribución de la vida fuera de la Tierra. Otros organismos como la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) también están llevando a cabo diversas misiones espaciales en esta dirección.
Esta búsqueda se basa en la idea de que las condiciones para la vida, como el agua líquida, la presencia de ciertos elementos químicos y la energía disponible, podrían existir en otros lugares del universo. Por ejemplo, el estudio de la presencia de agua en Marte y Júpiter busca determinar si esos planetas podrían albergar vida actualmente.
Pero estas investigaciones van incluso más allá de nuestro sistema solar. La astronomía ha identificado la existencia de exoplanetas, es decir, planetas que orbitan estrellas diferentes al Sol. En la actualidad, multitud de científicos y científicas tratan de encontrar si estos lugares también podrían tener condiciones adecuadas para la vida.
Desde el punto de vista científico, la vida extraterrestre podría adoptar una amplia variedad de formas y características; por ejemplo, a través de microorganismos capaces de sobrevivir en ambientes extremos de temperatura, salinidad, acidez o radiación.