17 noviembre 2024
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17 noviembre 2024

Norelly Coromoto: “Me mandaron a vivir a casa de una tía con dos primas para aprender a ser una niña”

Nos gustaría conocer la memoria histórica de nuestros abuelos, sus recuerdos y vivencias y por ello realizamos esta entrevista. 

Norelly Coromoto Pinzón Poca Terra, conocida como la abuela Nora, nació en 1953 en Maracay (Venezuela). Es experta en hacer mi plato favorito, los “plátanos dulces”, y ha trabajado toda su vida como secretaria. Le gusta el yoga y bailar. 

¿Cómo definirías el hecho de hacerte mayor?  

Una bendición de Dios porque llegar a estas edades es una bendición. 

¿Fuiste al colegio como nosotros? 

Sí, pero la situación no era la misma solo fui hasta la secundaria, que era de cinco cursos en vez de cuatro. 

¿Cuál fue tu primer trabajo? 

De secretaria en un ayuntamiento. 

¿Con cuántos años empezaste?  

Empecé a los diecisiete años, justo después de acabar los estudios. 

¿Siempre has trabajado de lo mismo? ¿Por qué?    

No, también fui la encargada de un parque infantil en un centro comercial. 

¿Qué crees que ha cambiado más desde tu infancia? ¿Y por qué? 

Los juegos infantiles porque en nuestra época jugábamos al trompo, a juegos de mesa, a papagayos, a la ere… Y hoy en día los niños juegan con las tabletas, el celular, la televisión y todo es aburrido y siempre están pendientes de las pantallas.   

¿Cómo fue tu experiencia al crecer rodeada de cuatro hermanos? 

No aprendí a jugar con muñecas ni casitas, sino a la pelota, a los soldaditos, a los carritos…Y fue muy fuerte el ambiente porque se burlaban de mí, me hacían llorar y no me dejaban salir sola sin mis hermanos, hasta que me mandaron a vivir a casa de una tía con dos primas para que aprendiera a ser una niña. Y de grande no me dejaron ir a la universidad porque las mujeres no tenían que estudiar, sino a buscarse un marido y ser ama de casa y los que pudieron estudiar eran mis hermanos. 

¿Tu crianza se la trasmitiste a tus hijos? ¿Por qué? 

¡NOO! Porque yo quería que mis hijos tuvieran las oportunidades que yo no tuve por ser mujer y como tengo dos hembras y un barón todo tenía que ser igual para los tres. 

¿Cómo fue tu experiencia de casada? 

Bonita porque nacieron mis hijos, pero difícil porque nos divorciamos y solo duramos 15 años de casados.

¿Cómo fue después del divorcio? 

Muy difícil, trabajar muy duro, hubo un tiempo en que tenía tres trabajos para salir adelante y a mis hijos les toco trabajar y estudiar al mismo tiempo, pero mi recompensa fue tener tres profesionales. 

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