Los inquilinos de este edificio de Barcelona llevan varios años luchando para no abandonar sus hogares después de que un fondo de inversión los haya intentado desahuciar
El Ayuntamiento de Barcelona ha llegado a un acuerdo con la entidad Hábitat 3 para comprar la Casa Orsola. Esta finca de 27 pisos ubicada en el barrio de l’Eixample lleva varias semanas ocupando los titulares de los medios de comunicación, y lo ocurrido con ella es clave para comprender la crisis del alquiler en la ciudad catalana.
Para entender la relevancia de esta noticia, debemos remontarnos a 2021, cuando el fondo de inversión Lioness Inversiones SL compró la Casa Orsola. Los fondos de inversión son empresas que compran cosas que puedan aumentar su valor con el tiempo. En el mercado inmobiliario, cada vez hay más fondos interesados en comprar viviendas para revenderlas o alquilarlas a precios más altos, y así ganar más dinero.
En el caso de la Casa Orsola, el fondo de inversión quería destinar el inmueble a alquileres de corta duración. Este tipo de alquileres suelen ir dirigidos a turistas y son más rentables para los propietarios, ya que pueden cobrar mucho más por una noche que con un contrato de larga duración.
Para conseguir esto, los nuevos propietarios del edificio comunicaron a los inquilinos que viven en la Casa Orsola que no les renovarían los contratos de alquiler y que tendrían que dejar sus casas. Su idea era triplicar el precio de los arrendamientos: de 700-900 euros a 2.100-2.800 euros mensuales.
Esto desató una ola de protestas y movilizaciones de los vecinos y el Sindicato de Inquilinas. Había personas que llevaban varios años viviendo en el edificio y que el fondo quería desahuciar: uno de los casos más sonados ha sido el de Josep Torrent, un profesor de 49 años que lleva 22 años viviendo en la Casa Orsola pagando un alquiler de 700 euros.
Finalmente, el Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que va a adquirir el inmueble, lo que ayudará a frenar su especulación inmobiliaria. La compra de edificios por parte de los ayuntamientos sirve para proteger a los vecinos ante este tipo de situaciones. Ciudades europeas como Viena o París están fomentando las viviendas sociales con el objetivo de que todos los vecinos puedan acceder a una vivienda.
¿Qué es la crisis de la vivienda?
El artículo 47 de la Constitución Española establece que “todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada”. Sin embargo, la actual crisis de la vivienda está provocando que este derecho no esté garantizado para una gran parte de la población.
Uno de los sectores más perjudicados son los jóvenes, que se enfrentan a enormes dificultades para independizarse de casa de sus familias y acceder a una vivienda propia o en alquiler. Los precios están alcanzando niveles desorbitados, obligando a muchas personas a vivir en condiciones precarias, en pisos compartidos o habitaciones diminutas.
En esta crisis, los pisos turísticos están teniendo un impacto directo. El auge de plataformas como Airbnb ha convertido viviendas que antes estaban destinadas al alquiler de vecinos residentes, en alojamientos turísticos de corta estancia, lo que ha reducido aún más la oferta de vivienda habitual.
La bajada de la oferta de casas y pisos disponibles para vivir todo el año impacta directamente en los precios de estos inmuebles: cuanta menos oferta hay, mayor es la competencia entre los compradores o inquilinos que quieren acceder a una vivienda, lo que provoca que los propietarios puedan pedir precios más altos.
¿De qué manera te afecta esta noticia?
Imagina que tú y tu familia lleváis varios años viviendo en una casa donde os sentís cómodos, en un barrio donde tienes amigos y puedes hacer las actividades que te gustan. Un día, te enteras de que el dueño del edificio donde vives ha vendido el inmueble a un fondo de inversión.
Esta empresa plantea subir los precios de los alquileres de forma drástica a todos los vecinos para ganar más dinero. Si no aceptáis las condiciones, el fondo no renovará los contratos de alquiler. De repente, podrías perder la casa en la que habías vivido toda tu vida y tu familia tendría que buscar una nueva vivienda.
Encontrar una nueva casa podría ser complicado para ti y tu familia. La crisis de la vivienda está provocando que cada vez sea más difícil acceder a un lugar digno y asequible en el que vivir, ya que los precios de los alquileres y la compra están desorbitados.
Aunque no seas uno de los inquilinos de la Casa Orsola, entender cómo esta situación puede afectarte a ti o a tus vecinos es fundamental para comprender el impacto que puede tener la crisis de la vivienda en la actualidad.
El ABC de la noticia
Desahucio: proceso por el que una persona es obligada a abandonar su vivienda, generalmente porque no ha pagado el alquiler o ha incumplido las condiciones del contrato.
Alquiler temporal: arrendamiento de una propiedad por un período corto de tiempo (por ejemplo, los alquileres turísticos son alquileres temporales).
Crisis de la vivienda: situación en la que muchas personas no pueden encontrar un lugar digno y adecuado para vivir debido a los altos precios de compra y/o alquiler.
Especulación inmobiliaria: compra de pisos y casas con la intención de venderlas o alquilarlas a un precio mayor para obtener dinero, sin importar las consecuencias para los vecinos.