¿Cómo fue la primera vuelta al mundo?
El viaje de Magallanes y Elcano fue la expedición marítima más importante desde el primer viaje de Colón a América
El 20 de septiembre de 1519, cinco barcos zarparon desde el puerto de Sanlúcar de Barrameda, en el sur de España, con el objetivo de llegar a las Islas Molucas, famosas por sus especias. La expedición estaba comandada por el navegante portugués Fernando de Magallanes, y sería completada años más tarde por el español Juan Sebastián Elcano. Nadie podía imaginar entonces que aquel viaje se convertiría en la primera vuelta al mundo de la historia.
¿Cuál era la idea inicial?
El objetivo de Fernando de Magallanes era llegar a las Islas de las Especias (las actuales Islas Molucas, en Indonesia), entonces muy famosas por la cantidad de especias exóticas, como la nuez moscada o el clavo, que eran muy valiosas en Europa.
Quería encontrar una ruta alternativa a la que utilizaban los portugueses, que ya controlaban la ruta del este, y pretendía llegar por la ruta del oeste, como había intentado Colón cuando descubrió América.
En ese momento, la idea de que la Tierra era redonda era todavía una hipótesis, aunque algunos marineros y científicos comenzaban a sospecharlo tras analizar mapas y globos terráqueos. Magallanes creía que ir hacia el oeste, cruzando el océano Atlántico hasta América del Sur y llegar desde el océano Pacífico, sería más rápido que seguir la ruta tradicional hacia el este, que pasaba por el cabo de Buena Esperanza, en el sur de África, y por el océano Índico.
¿Quién financió la expedición?
Magallanes, que era portugués, propuso la expedición al rey de Portugal, Manuel I, pero este la rechazó. En cambio, el rey español Carlos I de España vio una oportunidad y aceptó costear el viaje, poniendo a disposición cinco barcos y 239 marineros.
Tras el descubrimiento de América, España y Portugal habían firmado el Tratado de Tordesillas en 1494, un acuerdo para repartirse las zonas de exploración y conquista del mundo, trazando una línea imaginaria en el océano Atlántico: el este, para Portugal; el oeste, para España. Magallanes pensaba que las Molucas se encontraban en la parte de influencia española y que, por tanto, sería fácil llegar a la isla, cargar las especias y volver por la misma ruta.
¿Cómo empezó la expedición?
El viaje comenzó el 20 de septiembre de 1519, cuando cinco barcos zarparon desde el puerto de Sanlúcar de Barrameda, en Andalucía. La primera parada fue en las Islas Canarias, donde se abastecieron para un viaje que se preveía largo: llevaban comida para dos años.
Tras atravesar el océano Atlántico, llegaron al actual Río de Janeiro, en Brasil, pero enseguida empezaron los problemas. Hacía muchos meses que navegaban por el sur del continente americano buscando un paso que comunicara los dos mares, el Atlántico y el Pacífico, y muchos marineros empezaban a dudar de que Magallanes supiera realmente a dónde iban.
Además, el intenso frío del invierno, las tormentas y las condiciones meteorológicas adversas agravaron la situación: la tripulación dormía en la cubierta de los barcos, casi congelados, y las provisiones empezaban a escasear. El desánimo general y la crispación por el frío y el hambre dieron lugar a varios motines. Uno de los barcos naufragó y otro -el que llevaba más comida- desertó y regresó a España.
Finalmente, en octubre de 1520, Magallanes logró encontrar el paso que conectaba el océano Atlántico con el océano Pacífico, conocido hoy como el Estrecho de Magallanes.
¿Cómo fue la travesía por el Pacífico?
Cuando llegaron al Pacífico, la tripulación pensó que ya habían superado la parte más complicada del viaje. Pero ni siquiera imaginaban la inmensidad del océano que tenían por delante: les quedaban todavía miles de kilómetros de mar sin tierra a la vista.
Tanto fue así que no pararon a reponer provisiones, y durante tres meses sobrevivieron como pudieron: comiendo galletas infestadas de gusanos, bebiendo agua podrida y mordisqueando incluso el cuero de las velas.
Después de muchos meses navegando por el Pacífico buscando las Islas Molucas, la expedición llegó a las actuales Islas Filipinas, que entonces llamaron Islas de San Lorenzo. Al ver que aquellas tierras eran ricas en recursos, Magallanes intentó someter una de las islas del archipiélago, Mactán. Los locales se defendieron y, en la batalla, Fernando de Magallanes murió el 27 de abril de 1521.
¿Qué ocurrió después de la muerte de Magallanes?
Tras la muerte de Magallanes en Filipinas, el mando de la expedición pasó a manos del capitán vasco Juan Sebastián Elcano. Con solo dos naves operativas -la Trinidad y la Victoria- siguió el viaje hasta las Islas Molucas, donde llegaron en noviembre de 1521.
Aunque sospechaban que aquel territorio no estaba dentro de la zona de influencia española que había establecido el Tratado de Tordesillas, cargaron las naves con las especias e iniciaron el viaje de regreso.
La nave Trinidad intentó regresar por donde había venido, pero fue interceptada y secuestrada por barcos portugueses. Nunca llegó. En cambio, la nave Victoria, comandada por Elcano, quiso volver por una ruta diferente: rodeando el sur de África, a través del océano Índico.
Antes de embarcarse en esta última etapa, la nave Victoria hizo una parada en la isla de Timor, en Indonesia, para tomar provisiones. Querían realizar un viaje sin paradas para evitar encuentros con los portugueses, que habían ordenado capturar la expedición española.
Navegaron por el océano Índico y bordearon África a través del cabo de Buena Esperanza en un estado pésimo: sin agua potable, sin comida, y aguantando tormentas y condiciones meteorológicas muy complicadas.
La situación era tan crítica que se vieron obligados a parar la nave en Cabo Verde, en África, aunque sabían que era territorio enemigo, porque estaba bajo dominio portugués. Allí, algunos tripulantes fueron detenidos.
Finalmente, el 6 de septiembre de 1522, la nave Victoria logró llegar a España, casi tres años después de su salida. De 239 tripulantes quedaban 18 marineros famélicos y enfermos que, sin imaginarlo, acababan de hacer historia al completar la que fue la primera vuelta al mundo.
¿Por qué fue tan importante?
La expedición de Magallanes y Elcano supuso un cambio de paradigma y marcó un antes y un después en la historia de la humanidad. Por primera vez, se demostró de forma empírica que la Tierra era redonda, y se establecieron las bases para conocer mejor las dimensiones del mundo, tanto de las tierras como de los mares.