Encontrada la huella dactilar más antigua del mundo
La marca, descubierta por un equipo de científicos españoles en un yacimiento de Segovia, pertenece a un neandertal de hace 43.000 años
Un equipo de científicos españoles ha descubierto una piedra con la huella dactilar más antigua del mundo. Hace 43.000 años, un neandertal dejó la marca de su dedo en esta piedra de granito, considerada la muestra de arte mobiliar (objeto artístico pequeño y transportable) más antigua de Europa.
La piedra se encontró en 2022 en el yacimiento del Abrigo de San Lázaro, en Segovia, donde se cree que vivieron los últimos grupos de neandertales de la Península Ibérica y del mundo antes de extinguirse. Tras realizar varios estudios, los investigadores concluyeron que la huella pertenecía a un hombre joven, de entre 18 y 25 años, que vivió en aquella zona.
Una de las particularidades del objeto es que este tenía unas marcas naturales que recordaban a una cara con ojos y boca, pero sin nariz. Justo en el lugar donde iría la nariz, el hombre dejó su huella. El hallazgo sugiere que el neandertal posiblemente quiso completar esa cara untando su dedo en ocre, una sustancia que se usaba en pinturas rupestres.
Este descubrimiento es muy relevante porque no se trata de una marca accidental, sino de una acción intencionada, lo que podría indicar que los neandertales no solo fabricaban herramientas o cazaban, sino que también eran capaces de hacer arte y pensar de manera abstracta. Hasta ahora, se creía que esa capacidad solo la tenía el Homo sapiens.

¿Qué nos dice este descubrimiento sobre cómo pensaban los neandertales?
¿Quiénes fueron los neandertales?
Los neandertales (Homo neanderthalensis) fueron una especie humana que vivió en Europa, Asia occidental y parte del Medio Oriente durante unos 300.000 años, hasta que se extinguieron hace aproximadamente 40.000 años. Son nuestros parientes evolutivos más cercanos: los humanos actuales compartimos con ellos un 99,7% de nuestro ADN.
Estos homínidos eran físicamente robustos y tenían un cuerpo fuerte que se adaptaba bien al frío. Creaban sus propias herramientas con piedra y madera, cazaban en grupo y manejaban el fuego. Durante años se ha pensado que no eran tan inteligentes como los Homo sapiens, aunque los últimos hallazgos están cambiando esta visión.
Los neandertales coincidieron con los Homo sapiens durante miles de años, especialmente en Europa y Asia occidental. Durante ese período, hubo intercambios culturales y ambas especies se cruzaron, dejando descendencia. Sin embargo, los neandertales acabaron extinguiéndose y solo sobrevivieron los Homo sapiens, que es la especie a la que pertenecemos los humanos modernos.
Los Homo Sapiens se caracterizan por tener un cerebro muy desarrollado, un lenguaje complejo, pensamiento abstracto, y grandes habilidades para crear herramientas muy sofisticadas. Su capacidad para adaptarse y relacionarse hizo que se convirtieran en la especie dominante que sobrevivió.
¿De qué manera te afecta esta noticia?
Los humanos siempre hemos tenido el deseo de dejar rastro, de que quede alguna evidencia de nuestra existencia. La huella que un neandertal dejó en una piedra hace 43.000 años también tiene que ver con este deseo y puede entenderse como una forma primitiva de decir “yo estuve aquí”.
Hoy, miles de años después, seguimos haciendo lo mismo, aunque los medios hayan cambiado. Piensa, por ejemplo, en las fotos y vídeos que subimos a redes sociales y que sirven para mostrar al mundo quiénes somos. O en las búsquedas que hacemos en internet, que también forman parte de lo que conocemos como “huella digital”.
Muchos de estos datos se almacenan y quedarán registrados durante muchísimo tiempo. Probablemente, dentro de miles de años, los humanos del futuro estudiarán nuestra huella digital para conocer cómo vivíamos, qué pensábamos y cómo nos relacionábamos.